El sabor de las legumbres


El Día Mundial de las Legumbres, que se celebra cada año el
10 de febrero, es una oportunidad para concienciar sobre el papel vital de las legumbres en nuestra dieta, agricultura y sostenibilidad global.


Con este motivo, el proyecto INCREASE – Colecciones Inteligentes de Recursos Genéticos de Leguminosas Alimentarias para los Sistemas Agroalimentarios Europeos, presenta la iniciativa «EL SABOR DE LAS LEGUMBRES»: un concurso entre ciudadanos y restauradores para compartir recetas, conocimientos y sabores a base de legumbres.


Las legumbres, cultivadas en nuestro territorio en numerosas especies y variedades, son una base muy importante para una alimentación equilibrada y sana. Son una gran fuente de proteínas vegetales y micronutrientes con un bajo impacto medioambiental.
La judía en particular, por su eficiencia hídrica y su capacidad de fijación de nitrógeno en el suelo, resulta especialmente ventajosa en la fase de cultivo, ya que es un excelente aliado para regenerar y mantener un suelo sano. En efecto, no olvidemos que un suelo fértil es el ingrediente indispensable para la producción de los alimentos que nos nutren.


Por eso, el lema elegido por la FAO para este año es:
#Pulses: bringing diversity to agrifood systems
#Love pulses for a healthy diet and planet

Las legumbres son parte integrante de nuestra dieta tradicional: alubias, garbanzos, lentejas, habas, guisantes, altramuces y garbanzos están presentes en las cocinas locales de todas las regiones. Son un alimento fácil y duradero en su naturaleza de semilla seca y, gracias a la diversidad genética que aún hoy conserva, se han desarrollado variedades capaces de adaptarse al cultivo en diferentes microclimas

I legumi sono parte integrante della nostra dieta tradizionale: fagioli, ceci, lenticchie, fave, piselli, lupini e cicerchie sono presenti nelle cucine locali di tutte le regioni italiane. Sono un alimento di facile e lunga conservazione nella sua natura di seme essiccato e grazie alla diversità genetica che conserva ancora oggi, si sono sviluppate varietà capaci di adattarsi alla coltivazione in diversi microclimi.